23-08-2013, 01:30| Regionales |
Se reunieron después de las primarias. "Se trató la gobernabilidad” y no lo electoral, se aseguró desde el entorno del gobernador. El petrolero, en cambio, habló “de un trabajo conjunto hacia octubre”.
El encuentro fue calificado por fuentes cercanas al sapagismo como “cordial”. No se acordó una nueva reunión.
Neuquén > En medio de un gran hermetismo, el gobernador Jorge Sapag y el candidato a senador por el Movimiento Popular Neuquino (MPN), Guillermo Pereyra, mantuvieron ayer por la tarde una reunión en el aeropuerto de Neuquén, en lo que significó el primer acercamiento después de las elecciones primarias donde el titular del gremio petrolero ganó la pulseada interna del partido provincial, al imponerse sobre la vicegobernadora Ana Pechen.
El encuentro, que se desarrolló en la oficina de la Dirección de Aeronáutica de Neuquén -sin acceso de la prensa y que se extendió durante 45 minutos- fue calificado por fuentes cercanas al gobernador como “cordial”.
Las mismas fuentes indicaron que la reunión había sido solicitada por Pereyra y que giró en torno a la “gobernabilidad”, como también el presente y el futuro del MPN.
La mira en octubre
Nada se dijo de parte del sapagismo sobre la cuestión electoral, aunque desde el sector de Pereyra se habló “de un trabajo partidario conjunto de cara a las elecciones legislativas de octubre”.
Se explicó también que intercambiaron opiniones acerca de la necesidad de impulsar una modificación de la Ley Federal de Hidrocarburos, para que se contemple la explotación de recursos no convencionales, que en la actualidad no cuentan con el marco legal correspondiente. En este punto, Pereyra manifestó que “es necesario readecuar también el convenio colectivo de trabajo para que quienes operen en este tipo de yacimientos tengan el amparo de una normativa apropiada”.
Heridas abiertas
La interna del MPN, que se desarrolló en el marco de las primarias del 11 de este mes, resultó una de las más duras de la historia en términos de acusaciones y posturas disímiles respecto a temas centrales para la provincia como la política hidrocarburífera. Y desde allí surge la incógnita respecto de las posibilidades de lograr una unidad pensando ya en las elecciones generales del 27 de octubre, como también si este encuentro entre Sapag y Pereyra fue sólo un formalismo o apunta a fortalecer de verdad al partido provincial.
La que puso un manto de duda sobre esto último fue la propia Pechen en esta semana, al sostener que si bien su intención es un MPN unido advirtió sobre “mucha hipocresía, mentiras y una guerra sucia” que se desarrolló durante la campaña, que no será “fácil de digerir”
En las últimas elecciones primarias el MPN cosechó casi el 60 por ciento de los votos entre la lista A (que llevaba como precandidata a Pechen) y la B de Pereyra, que obtuvo más de 100 mil sufragios y que se impuso en casi todas las localidades de la provincia.