Protesta de trabajadores de Molarsa
Piden que se le asignen tareas livianas a un empleado que se lesionó. También por el despido de 15 personas precarizadas.
Neuquén > Los trabajadores de la papelera Molarsa volvieron ayer a reclamar sobre la Ruta Provincial Nº 7, a la altura de Parque Industrial, por la reincorporación de un empleado, el despido de 15 personas precarizadas y por mejoras en las condiciones laborales. Hoy serán recibidos por la Comisión de Asuntos Laborales de la Legislatura, donde analizarán la situación.
“Planteamos al poder político que no se quede en las palabras. Tanto la vicegobernadora Ana Pechen como varios diputados se manifestaron a favor de nuestro reclamo. No se puede permitir que estos empresarios extranjeros vengan a pisotear los derechos de los trabajadores con absoluta impunidad”, comunicó la Comisión Interna de Molarsa.
La metodología de protesta fue bloquear la autovía Neuquén-Centenario desde las 8 horas y hasta las 13 dejando libres las colectoras libres para la circulación. A pesar de las demoras en el tránsito no hubo inconvenientes dado que se dispuso de un operativo vial. La protesta obrera lleva varios meses y se intensificó en las últimas semanas ante la falta de respuestas de las autoridades de la empresa.
“Exigimos que el grupo multinacional Sanovo Greepack deje de violar las leyes laborales y cumpla con la asignación de tareas a Chango, y deje de atacar a los trabajadores papeleros con acciones como la militarización de la fábrica y recientemente con descuentos masivos”, se informó.
Mejores condiciones de trabajo
Chango Álvarez trabaja desde hace 20 años en la papelera y hace siete meses se lesionó la espalda al realizar una labor manual que debería, según los empleados, ser automatizada. El hombre trasladó alrededor de 400 kilos de cartón y papel sobre un palet (bandeja de carga) cuando sintió el dolor en su cuerpo. El médico le comunicó que ya no podía hacer tareas pesadas y lo certificó para que desarrolle tareas livianas. Desde la empresa indicaron que no existen esas tareas y que por lo tanto la persona no puede volver a la papelera.
“Podría desempeñar tareas como sereno, en la prensa o en la parte de químicos que son trabajos livianos”, señaló Fuentes y agregó: “La empresa tiene que invertir en cintas y un auto elevador que deposite el peso del cartón y el papel en una máquina que se encarga de triturar esa materia. Esta situación no se puede volver a repetir”, manifestó Fuentes.
El conflicto motivó la intervención de la Subsecretaría de Trabajo que convocó a dos audiencias de partes aunque los representantes de la empresa en la primera no participaron y en la segunda propusieron que “nuestro compañero continuara un año más fuera de su puesto", indicó el delegado.