Centenario: todo apunta a una venganza




Centenario/Neuquén > El crimen del joven petrolero Damián Tapia, de 32 años, navegaba en un mar de dudas. Es que los investigadores no tienen detenidos y por el momento la hipótesis más fuerte es la de un ajuste de cuentas, ya que la víctima quedó tirada en el suelo con la billetera con dinero y una mochilla, y se descarta un robo.
La autopsia develó que la muerte fue “casi instantánea”, por una profunda puñalada en la zona de la nunca, de unos 13 centímetros. Esos indicios, según los investigadores, llevan a sospechar de una venganza como posible móvil del crimen.
El joven partió del bar de su tío alrededor de las 3.30 de la madrugada del lunes. Estaba de franco en la empresa Hot Hed, donde trabajaba, y se había ido al lago Mari Menuco con amigos a comer un asado. El joven estaba casado y tenía una beba pequeña.
Sin embargo, otras fuentes aseguraron que vieron a Tapia salir mucho más tarde de ese bar, que frecuentaba por cuestiones familiares. Lo vieron jugar al pool y sin ningún problema, precisamente minutos antes de que se produjera la muerte.
De acuerdo con la autopsia, la víctima no pudo haber vivido más de 15 segundos por el profundo corte que le dañó la médula espinal. Esto sucedió en la calle Jesús Brillo, en la colectora de la Ruta 7. La moto circulaba en primera, hacia el sector sur, en una zona poco transitada, en un barrio donde hay empresas, casas residenciales y una plazoleta.
La duda que tienen los investigadores es si el muchacho fue abordado violentamente o si alguien le clavó el puñal por atrás, mientras iba de acompañante.
El casco de la víctima quedó a unos metros detrás de la moto, y la mochila adelante del rodado. Estaba cerrada y en la billetera había incluso dinero en efectivo. (Diario La Mañana Neuquén)