"Se trata de un tributo que afecta entre el 10% y el 15% de los trabajadores", aseveró Kicillof. El jefe de ministros, en tanto, aseguró que las empresas de transporte se comprometieron "a brindar hoy el servicio pese al cese de actividades".
Equipo de Economía
El gobierno cuestionó el paro por Ganancias y defendió el impuesto
"Parecería un ataque a la política de Estado "- Una de las frases que dejó la conferencia de prensa que realizaron, ayer, los ministros Kicillof y Aníbal Fernández.
El gobierno nacional volvió a defender ayer la política del Impuesto a las Ganancias, a horas del paro convocado por los gremios del transporte que reclaman una suba del mínimo no imponible. Las empresas, por su parte, se comprometieron a garantizar la prestación a cambio de seguridad en las terminales.
En una conferencia de prensa que ofreció poco después del mediodía junto con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, el ministro de Economía, Axel Kicillof, apuntó contra las organizaciones que impulsan la medida, cuando interpretó que el paro "parecería un ataque a la política de Estado". El ministro recalcó que los fondos recaudados "no van al Estado sino a sostener la política de Estado", y reiteró que se trata de un impuesto que afecta sólo "al diez, a lo sumo el 15 por ciento de los trabajadores" del transporte, "que son los que más ganan". En ese orden, el funcionario reclamó a los sindicatos que expliquen "la verdadera naturaleza" del paro.
En la mañana, mientras se desarrollaba una reunión entre los ministros del gobierno y los empresarios del sector transportista, el titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que nuclea a los choferes del transporte público, advirtió sobre supuestas amenazas de retirar subsidios a las compañías que no garanticen la prestación del servicio, "pueden traer más problemas". En diálogo radial, Fernández indicó que "hay reuniones con el sector empresario manifestando que no le van a dar gasoil y subsidios a las empresas". A propósito, el titular de la UTA, advirtió que "las presiones son malas porque traen más problemas", y subrayó que a "los coches los sacan los conductores, no los empresarios. Nos hubiese llamado a nosotros también, eso es buscar soluciones, no aprietes."
A su turno, tras la reunión, el ministro de Economía aclaró que los empresarios "no vinieron ni a pedir más subsidios ni nada parecido". Por su parte, Aníbal Fernández, aseguró que las empresas se comprometieron a brindar el servicio hoy pese al paro de actividades convocado por los gremios del sector, y garantizó como contraparte la presencia de fuerzas de seguridad en las distintas terminales: "para que no se produzca ningún tipo de inconvenientes".
Fernández rechazó los argumentos de su tocayo de la UTA al señalar que "no somos canallas para llamar a un empresario y apretarlo con cosas de estas características". El ministro coordinador dijo que pidió a empresarios que procedan con una "actitud responsable" ante el paro de actividades. El funcionario precisó que a la reunión que se realizó en Casa Rosada, "no llamamos para subir subsidios sino para pedir una actitud responsable por parte de los empresarios, que tienen que hablar con los gremios" para explicarles de qué manera los fondos de Ganancias vuelven a la actividad por medio de la política de subsidios.
En los días previos, el jefe de Gabinete mantuvo reuniones con los secretarios generales de los sindicatos transportistas en las que las partes intentaron arribar a un acuerdo que finalmente no se produjo. Ayer, al dar cuenta de la reunión con los empresarios coincidió con Kicillof en la condena de la medida: "el Estado pone la plata y el paro se lo hacen al Estado", se quejó.
Por el lado de los empresarios, el titular de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), Marcelo Lifting, aseguró tras el encuentro con los ministros que los empresarios del sector harán durante la jornada "todo lo posible para poner a disposición los coches para que la gente pueda ir a trabajar mañana (por hoy)".
El empresario destacó el clima de la reunión que, consideró, se produjo en "un panorama político con el que nosotros no tenemos nada que ver". Lifting, no obstante remarcó que coincide con la posición oficial frente al tributo de la discordia: "nosotros creemos que la afectación a los trabajadores del Impuesto a las Ganancias tiene bajo impacto, por lo tanto en eso compartimos la opinión del gobierno en que está afectando entre el diez y el 15 por ciento de nuestro personal, nada más".
Por su parte, el titular de la Cámara Empresaria de Larga Distancia (CELADI), Mario Verdeguer, le dijo a este medio que los empresarios hicieron hincapié en el pedido de seguridad "para proteger primero a los pasajeros y después al personal y a los bienes de las empresas".
El también propietario de la línea Autotransportes San Juan, reconoció que las compañías sólo podrían asegurar una prestación mínima del servicio "con aquellas personas que no se consideran afectadas" por el gravamen. La UTA, finalizó el titular de CELADI, "dice que para en defensa de los afectados, pero esos no son la mayoría" de los trabajadores. A propósito del servicio, la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT) emitió un comunicado en el que advirtió que en caso de cancelación o suspensión de los servicios "las empresas deben dar aviso del mismo mediante carteles en sus boleterías". Asimismo, aclaró el mensaje, los pasajeros afectados podrán optar por el reintegro total del importe del boleto "o que se los reubique en el servicio subsiguiente". Para formalizar denuncias, el organismo dispuso el número 0800-333-0300 de 9 a 17 horas.
Otros funcionarios que se pronunciaron sobre el paro fueron el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y su par de Interior y Transporte, Florencio Randazzo. Tomada aseguró que los gremios opositores "centraron la demanda en el impuesto a las ganancias, que afecta a un 8% de los trabajadores registrados". Para Randazzo, el paro de transporte está "absolutamente fuera de lugar" porque es llevado adelante por sindicatos que "han sido privilegiados" en los últimos años por las políticas del gobierno nacional. Por su parte, el camionero Pablo Moyano fustigó la justificación del gravamen por parte del gobierno, y amenazó con una "profundización del conflicto" si la administración "sigue provocando y no da respuesta a los reclamos". Finalmente, el titular de UOCRA, Gerardo Martínez, quien informó que "no nos vamos a sumar a esta medida de fuerza y, si no vamos a trabajar, es porque vamos a estar impedidos" debido al paro.
Fuente: Tiempo Argentino