Hoy se recordará a Don Jaime De Nevares

Hoy se cumplen 20 años de la muerte de Jaime De Nevares y hoy a las 19 horas se realizará una ceremonia en la catedral de Neuquén capital. Don Jaime fue obispo, abogado y diputado nacional.
Esta mañana el padre Rubén Capitanio contó que estuvo presente cuando falleció "a las 2 de la mañana" y sostuvo: "tuve la suerte para mi porque fue un momento que me tocó mucho y me hizo bien; a la madrugada se había sumado un médico amigo y ese mismo día me llamó el periodista Santos Biasati y le dije, porque me surgió, porque era lo que estaba sintiendo, el orgullo y satisfacción es haber compartido tantos momentos de su vida".
Capitanio sentenció que "me parece que hoy se habla tanto del papá Francisco, que la iglesia tiene que salir a las periferias físicas y existenciales; hay que salir a las orillas de la gente que no pudo entrar al lago del progreso y Jaime nos acompañó y salió a buscar a la gente no como el maestro que enseña, sino como el hermano que acompaña; a sentarse a la mesa de la vida de la fe y de la dignidad humana".
El párroco del Santuario de la Virgen de Luján en Centenario comentó que "algunos se quejaban que el obispo: `no esta con nosotros´ y era cierto es que no era un obispo de la catedral sino de la gente; era más fácil encontrarlo donde la gente estaba, no por vivir, sino por sobrevivir".
También Capitanio contó la anécdota con la mujer de Jorge Rafael Videla (presidente golpista de 1976) al señalar que "no fue un acto de desplante, sino fue un acto de dignidad, cuando ella quiso hacerlo sentir que ella tenía el poder, por ser la mujer de quien era, y Don Jaime no se rebajó sino lo que le pidió dónde estaban los desaparecidos, él tenía en la mano la lista que le acercaron los familiares; y Don Jaime le dijo `ya es tarde señora´ y a Don Jaime no le importaba quedar bien sino hacer el bien".
Sobre la difusión de su libro Hombre Fiel, El andar de Don Jaime de Nevares, Capitanio dijo que "la gente es buena, me llena de satisfacción cuando me piden los padres del interior que les lleve el libro y cuando me dicen `la verdad que me encantó no pude parar de leerlo´".